Temporeros, sin papeles, semiesclavos, exiliados, retirantes y otros muchos tipos de excluidos de su sociedad. Llegan a la Península y a las islas. A su paraíso del Norte. A su sueño de libertad.
Atrás queda todo. Todos…
Parece ser que a los jovenes celtibéricos se les agotaron las fuerzas. O que al doblar el lomo le crujen las vértebras Que no compensa tanto esfuerzo por 50€ al día. O que el campo es pá hacer senderismo, ciclismo y cualquier cosa lúdicamente correcta. O que acabe en «ismo». O simplemente que sudar la gota gorda es en el Gimn.
Los viejos no estamos felices. Algo hicimos mal. Muy mal.
Entre tanto, cuando vamos al Mercadona queremos cosas de comer bien fresquitas y lustrosas, si es posible cosechadas ayer. Es por eso que los chicos del Sur tienen aqui su lugarcico, su ansiado «Pan con el Sudor de Su Frente»…
Medran edificios de oficinas (ahora semi vacías), colegios, escuelas y universidades; pá llenarlas…
«Los bancales vacios». Mustios los limoneros. Los Legones enrrobinaos. Los campos emplasticaos.
Cortijás abandonás. Aldeas y Pueblicos vacíosFuentes secásMuflones y javalises retoman sus tierras.https://www.vozpopuli.com/economia_y_finanzas/espana-temporeros-honduras-marruecos.html
Todo esto me recuerda con saudade mi vendimia del 72 en Mas de Marsans cerca de Montpellier, Distrito 34, de la campiña francesa. Fueron 35 días de esfuerzo, sudor y alegría, con mis tres compinches del club Remo y otros 40 braceros del Noroeste de Murcia y un clan de honorables gitanos.
Fué nuestro bautismo de humildad. Fue un orgullo pertenecer a ese equipo. Tambien fue muy satisfactorio juntar 33.000 pesetas que equivalía a 6 meses de trabajo de lo que ganaba mi padre en esa epoca, unas 6.000 pts mes ( 36€ al cambio).
Es por eso que comprendo a los hondureños y a cualquier otro que nunca deserta del Arado…
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Las Músicas de Ultramar
Como tantos otros tambien Teresa Parodi, emigró de su bella Corrientes, de su Río Paraná a la gran urbe de Buenos Aires. Allí sintió sus pérdidas, las añoranzas de su niñez de sus raices y paisajes; ee su Agüelica Emilia
LA GACETA DE ULTRAMAR 