La Gaceta de Ultramar (0ct.-24) En El Camino

No consigo mejorar este texto de Amir Sater, cantado por Maria Bethania.

Únicamente que el camino más difícil es aquel que no se intenta.

Algunas veces en ocasiones que se nos presentaban alguna dificultad extrema y mis muchachos se quedaban atorados como “vaca no lodazal”.

Pensaba y les decía.

Si los americanos fueron a la luna, usemos la cabeza que de esta salimos.

Y salíamos.

El otro día, al salir de El ganso, camino de Foncebadon, me paré en un puestero de gallaos y bastones que sobre la vera del camino vendía dichos utensilios.

Los hacia el mismo me dijo con buenas varas de avellano y otros árboles menos pesados.

Con su navaja a pin, pin, pin, iba perfilando la madera.

Yo necesitaba un bastón largo para cuando vas por desniveles equilibrar mejor el paso.

Me invitó a su tapera que tenia allí mismo y no vimos ninguno.

Rebuscó y rebuscó, pero no encontrábamos ninguno adecuado.

Lo vi un poco desilusionado por no poder encontrar el adecuado, así que decidí escoger cualquier palo.

Ese, ese le dije.

? Seguro…

Mira que este palo es un poco fino para tu peso.

Nada es ese el que me gusta, pues lleva un asidero a mañoso.

? Y que quiere Ud. que le dibuje, me dijo.

Lo alisa y le pone la cruz.

Yo mientras voy a buscar piedras de dulce de esas filosas…

Al rato volví y ya estaba a falta de la Cruz, lo vi revolviendo en la tapera en la búsqueda de su rotulador colorao.

Escuche Bienvenido yo tengo un bolígrafo colorao aquí en mi mochila.

No es que el rotulador es mejor que es de esos indelebles que no se borran.

! No se preocupe a mi me sirve con el boli.

No, no: es es que lo bien hecho, hecho está.

Siguió buscando.

Al buen rato volvió sin nada y un poco inconformado y me hizo el dibujo con el bolígrafo.

En ese corto espacio, ya conectamos con esas hondas invisibles que vagan por los espacios y unen a las personas de bien

Hablamos de mi caminar por el camino, de mi antigua estancia por esas tierras en los tiempos de la mili.

También me contó de su mili poco después de la guerra, del mundo que vio del que no sabía nada que antes de licenciarse mandó que le escribieran una carta para su padre diciéndole que no volvería a la finca del amo donde vivían y trabajaban por un techo y la comida, que hasta las mulas vivían mejor que ellos.

Y le fue bien, me dijo, se agenció una moza casadera, crio sus hijos y hasta aprendió de cuentas y letras.

-¿Qué años me echas mozo?

Me preguntó-.

76 le dije.

Que vaaaá son ya 89…

! Ni le pregunté cuál es su secreto, calculo que ya lo sé.

Bueno mozo que tengas buen caminar, que es hora de ir pal pueblo que mi mujer me tiene preparado un pote de lacón con grelos bien calenticos.

Apreté su recia y firme mano y nos deseamos lo mejor.

Publicado por Time Advocate

Mi nombre es José Ramón Sáez Nicolás. Soy Abogado y Economista, titular del despacho “Dualis Economía Gestión y Derecho”, con sede en Murcia, actividad profesional que desempeño por cuenta propia desde 1995. Licenciado en Derecho y Diplomado en Ciencias Empresariales, con la especialidad en Análisis Contable, por la Universidad de Murcia, y Grado en Administración y Dirección de Empresas, por la UCAM, mi formación y vocación están orientadas al mundo de la empresa y los emprendedores, las nuevas tecnologías, la gestión del conocimiento, la creación de valor y la innovación.

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